miércoles, 13 de diciembre de 2006

Color y Policromías

La arquitectura virreynal expresa, por otro lado, un singular lenguaje cromático. El rojo almagre, el amarillo oropimente, el azul añil y el blanco de la cal, así como el invariable verde y rojo para las carpinterías, nos ofrece una ciudad de perspectivas urbanas agradables por sus audaces tonalidades.
Asociadas a este lenguaje, vamos descubriendo nuevas formas, nuevas expresiones. La arquitectura estuvo ambientada con vistosas pinturas murales tanto en el interior como en el exterior. En este último caso, imaginamos con mucha aproximación, perspectivas urbanas policromas durante los siglos diecisiete y dieciocho, inclusive durante el austero siglo XIX..
Las investigaciones de archivo nos permiten advertir el permanente gusto por decorar las viviendas e iglesias según las normas del estilo de moda. .
Las casas Lynch y Airaldi (s. XVIII); Ganoza Chopitea y Aranda (s. XVIII); Risco y Padros (s. XX); e iglesias como la Compañía y la Merced (s. XII); Huamán y el Carmen (s XVIII); Santa Rosa (s. XVIII), nos dan la pauta objetiva con bellas evidencias que imitan azulejos, representan paisajes, cortinajes, escenas costumbristas, entre otras expresiones plásticas.
Un detalle de interés y poco conocido es el arreglo de las rejas de hierro ornamentales. Los barrotes fueron pintados en negro y los hierros decorativos dorados con pan de oro. El color blanco es de concepción contemporánea.

No hay comentarios: